¿Cómo implementar un sistema integral de Compliance en una empresa en Nicaragua?

Bajo las buenas prácticas empresariales, una empresa puede implementar y diseñar sistemas, políticas y procedimientos para el control preventivo de los riesgos normativos de las empresas. Generar una cultura de prevención en aras del cumplimiento normativo y procedimental en la operación de una empresa determinará el éxito, ya que permitirá una visualización anticipada de posibles contingentes a la misma.

Un programa de compliance o cumplimiento se define como “un sistema de gestión empresarial que tiene como objetivo prevenir, y, si resulta necesario, identificar y sancionar las infracciones de leyes, regulaciones, códigos o procedimientos internos que tienen lugar en una organización, promoviendo una cultura de cumplimiento” (AS3906- Compliance Programmes, Standars Australia 1988, pag. 1.2).

Un sistema de gestión integral de cumplimiento implica determinar obligaciones, establecer controles preventivos y funciones para la mitigación y minimización de los posibles riesgos a los que la empresa se ve expuesta, generalmente por su giro de negocio.

¿Qué debemos tomar en cuenta al momento de diseñar un sistema de compliance?

Un sistema de gestión evalúa riesgos internos y externos de la empresa y los contrasta con la aplicación de disposiciones legales de la mano de los principios generales de las buenas prácticas del gobierno corporativo, basándonos en esos insumos, son seis las palabras claves que ayudarán al desarrollo de un buen sistema integral de cumplimiento: establecer, desarrollar, implementar, evaluar, mantener y mejorar. Tomando en cuenta lo anterior, ¿cómo creamos el sistema de cumplimiento?

    1. Se deben establecer e identificar todas aquellas actividades en las que, producto de su ejecución, deban de cumplirse con disposiciones de índole normativas que al no cumplirlas generen contingencias a la empresa.
    2. Una vez determinados los riegos potenciales a los que se encuentre la empresa, se deberá realizar lo siguiente:
      • Definir las acciones y determinar políticas y procedimientos necesarios que disminuyan los riesgos de incumplimiento normativo;
      • Determinar un programa de capacitación continua al personal, para dotarlos de las herramientas necesarias para la prevención e identificación temprana de los riegos;
      • Determinar un sistema de régimen disciplinario que establezca sanciones en caso de cualquier incumplimiento normativo y procedimental de la empresa;
      • Definir revisiones periódicas que permitan evaluar los resultados de la implementación de la política de cumplimiento;
      • Conforme a los resultados de la revisión periódica, determinar planes de mejora continua para fortalecer la mitigación de los riesgos.

Contar con un sistema de cumplimiento integral permitirá una disminución sustancial de la incertidumbre en las transacciones comerciales, generando confianza en las instituciones y por consiguiente un posicionamiento en el mercado más robusto.